“Il dolce far niente”, el infravalorado arte de no hacer
nada. Cada mayo, sentada frente a unos apuntes con sobredosis de subrayado y
con la sensación de no saber si el tiempo pasa demasiado deprisa o demasiado
lento, mi máxima es resignarme a que mis neuronas “curren”, excediendo las
horas establecidas en los convenios laborales, con la esperanza de matar unas
cuantas de ellas (live fast, die young) y
dejar a las que queden reposar en mi cerebro mientras disfruto del verano en
posición horizontal, ya sea en el sofá, la cama o en una hamaca de playa. Ya lo
decía Groucho Marx: “No vale la pena hacer nada que no puedas hacer en la cama”.
Sí Groucho, en la cama se pueden hacer muchas cosas, entre
ellas disfrutar de una buena serie. Me encantan las que consiguen hacerme
sentir dentro incluso cuando el capítulo ha llegado a su fin, las que me hacen
reflexionar y reír a carcajadas. Este año he descubierto cuatro que os harán
amortizar vuestras camas como nunca:
SUITS
No hace falta estar en el “Far West”
para presenciar un verdadero duelo, los de Suits tienen como escenario un bufete
y sus pistoleros son los abogados más codiciados por la jet set neoyorkina. Las
balas son sustituidas por diálogos ácidos, cargados de ironía y humor, y el
mítico atuendo western por trajes impecables, blusas, faldas tubo y taconazos.
Aunque la serie gira en torno al
materialismo, e idealiza la profesión de abogado, los diálogos son, desde mi
punto de vista, geniales, lo mismo que los personajes, entre los que hay
continuas luchas de poder que a veces son tensas y otras tronchantes.
Lo mejor: la relación de
mandato/colegueo que hay entre Mike Ross (Patrick J. Adams) y
Harvey Specter (Gabriel
Macht), y las excentricidades de Louis Litt (Rick Hoffman).
Lo peor: con el tiempo se vuelve
predecible. Creo que la nueva temporada empieza algo floja, tienen que tirar de
nuevos recursos o la serie acabará aburriendo.
TRUE DETECTIVE
No tuve más remedio que verla después de que Tere (blogger
de Sabor Azul Klein) hablase maravillas de ella e incluso se pusiese una foto
de McConaughey en su perfil de Whatsapp
(friki). Ahora entiendo por qué lo hizo. Para los que me preguntan: “es una
serie policiaca al estilo CSI pero sin mariconadas!”, vamos, que se deja de los
míticos diálogos americanos que Goyo Giménez parodiaba a la perfección en uno
de sus conocidos monólogos, y hace que la labor de los detectives sea más
realista al resolverse sólo un caso por temporada.
Se desarrolla en Lousiana, la América profunda, e incluye
una dura crítica a la sociedad ultraconservadora estadounidense que se hace
patente, sobre todo, a través del personaje de McConaughey, para mí de lo
mejorcito de la serie, hace un papelazo!! (Dicen las malas lenguas que el óscar
se debe más a su actuación en la serie que en “Dallas Buyer Club”).
La serie evoluciona a través de dos líneas temporales
distintas, lo que no hace más que aumentar la intriga de la trama. Recomiendo
verla en versión original porque los diálogos con acentazo americano cerrado
son brutales.
Lo mejor: las delirantes reflexiones sobre la vida de Rust
(McConaughey); son la leche! Así como las sinceras discusiones entre los
detectives protagonistas Rust y Marty (Woody Harrelson). Además, la intro y el
tema elegido para la misma hacen que desde el principio te sientas dentro.
Lo peor: no terminé de entender algunas cosas del final de
la primera temporada.
ORANGE IS
THE NEW BLACK
Una americana “blanquita” de clase media-alta es condenada a
pasar un año entero en prisión por colaborar con una banda de narcotráfico, y
lo que allí encuentra le hace toparse de bruces con la realidad y reflexionar
sobre quién es. La disgregación racial, los trapicheos, la corrupción, la
sexualidad y el amor son tratados a través de la perspectiva llena de humor de
las distintas y geniales presas de Litchfield y su personal.
A pesar de que Piper
Chapman (Taylor
Schilling) es la principal protagonista, todas y cada una de las
presas tienen un papel relevante en la trama y sus historias van saliendo poco
a poco a la luz. Esta es una de las cosas que más me gustan de la serie, cuyo
director ha sabido hacerse con un reparto brutal que le hace justicia.
Lo mejor: La relación y trifulcas entre el clan de las “negras”,
las “blancas” y las “hispanas” que se va complicando más cada temporada y que deja,
para mí, los momentos más divertidos de la serie. También me encanta la intro (sí,
esta también) que está representada por presas reales.
Lo peor: nada.
THE NEWSROOM
Hoy en día, en la era de las redes sociales y la libertad de
expresión es fácil encontrar cualquier tipo de información y cualquier tipo de
juicios sobre la misma. Sin embargo, de qué fuente de información deberíamos
fiarnos? De los medios, que parecen movidos por los intereses de unos pocos? De
la información anónima y de lo más variopinta que podemos encontrar en
internet? Sí, es difícil encontrar información objetiva y fiable.
The Newsroom trata de eso, del reto que se propone una
productora norteamericana de noticias al tratar de ofrecer los hechos a los
telespectadores tal y como son, e intentar hacerles pensar de forma crítica
analizando cada una de las noticias al dedillo desde diferentes perspectivas.
No importa por encima de qué intereses haya que pasar, McKenzie (Emily
Mortimer) cree que los ciudadanos deben saber la verdad.
Lo mejor: los hechos retrasmitidos por este noticiario son acontecimientos
reales transcurridos en el mundo a partir de 2008, por eso merece tanto la pena,
da la oportunidad de pensar “claro,
ahora entiendo por qué esto nos lo contaron así o asá!”.
Me gustó, además, saber cómo funciona una agencia
informativa de televisión por dentro. Nunca me lo había planteado.
Lo peor: la mayoría de los hechos acontecen en Estados
Unidos, por lo que a veces andaba un poco perdida.
Espero que disfrutéis con ellas. Y ya sabéis, este verano cultivad "il dolce far niente"!!
Ana Ferrán
Espero que disfrutéis con ellas. Y ya sabéis, este verano cultivad "il dolce far niente"!!
Ana Ferrán
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